La anapaita de Bellver de Cerdanya es uno de esos clásicos que aparecen en todos los libros sobre la mineralogía española. Se trata de un fosfato que cristaliza en cristales verdes que aparecen en el interior de nódulos de tamaño centimétrico.
Nódulo con anapaita, Bellver de Cerdanya, Lleida, 4 cm
Nosotros nunca hemos estado en el yacimiento, pero el ejemplar que os enseñamos fue recogido por nuestro amigo Alex, que nos lo regaló hace tiempo.
Las minas de Carracedo explotaban arsenopirita y calcopirita entre otros minerales enclavados en un skarn rico en granates. La muestra que hoy os enseñamos contiene malaquita y trazas de cuprita y cobre nativo, si bien es necesario observarlos con la lupa y tener ciertos conocimientos de mineralogía.
Malaquita, cobre nativo y cuprita, Minas de Carracedo, Palencia, 8 cm.
Nosotros tenemos lupa pero andamos escasos de sabiduría mineralógica aunque tenemos fe ciega en nuestro amigo Jesus y si él dice que se ve cuprita y cobre nativo, no hay ninguna duda. La franja que atraviesa la parte central es donde se encuentran. Color de cobre ya tiene, eso es claro a simple vista.
Los nódulos esféricos de sílex de las localidades de Troyes y Épernay, en Francia, constituyen una notable curiosidad que hemos conocido gracias a nuestro colega Jesús, que las encontró sueltas sobre el terreno en los alrededores de Troyes.
Sílex, Troyes Epernay, Francia, 5 cm
Gracias a él podemos enseñaros estas perfectas esferas de sílex, que van desde un centímetro de diámetro a más de 5 como podéis ver en alguna de las fotos. Se trata de sílex ya que en una de las muestras se ve perfectamente el material interior de las esferas y las fractura concoidea propia del sílex.
Esferas de silex, Troyes, Francia
En la zona del Marne hubo una gran desarrollo de la industria lítica en el neolítico, seguramente gracias a la abundancia de sílex en toda la comarca.
Los nódulos de marcasita de Épernay y Troyes, en la región de Marne (Francia), se encuentran sueltos sobre el terreno. Presentan tamaños importantes, de varios centímetros y variedad de formas, desde esféricos hasta grandes formaciones botroidales. Siempre muy alteradas y oxidadas, hasta el punto en que en algunos casos la forma de los cristales de marcasita apenas se distingue.
Marcasita, Épernay, Marne, Francia, 4 cms
Marcasita, Épernay, Marne, Francia, 2 cm
Gracias a Jesús, infatigable buscador tanto en su Cádiz natal como cuando se desplaza a otros lugares, podemos enseñaros estas bonitas marcasitas.
Las canteras de arena de Laño son uno de los lugares más espectaculares que los amantes de la naturaleza podemos visitar en la zona del Condado de Treviño, Burgos. Como en tantas ocasiones las descubrimos gracias a una excursión de Harridunak y son varias las ocasiones que posteriormente nos hemos acercado hasta allí para disfrutar de su particular paisaje. Si lo compaginaos con una visita previa a las Gobas de Laño y Santorkaria, tendremos una excursión perfecta.
Niveles geológicos, Cantera de Laño, Burgos
Lo primero comentar que para las Gobas debemos ir hasta el mismo pueblo de Laño y allí comenzar el recorrido por las mismas. Perfectamente podemos pasar toda la mañana visitando los antiguos eremitorios así que hay que planificar el día. Antes de llegar al pueblo por la carretera, habremos visto a la derecha una cantera, más bien un frente montañoso o una corta, no hay cantera de estas de caliza a las que estamos acostumbrados. esta no es la cantera de arena que os vamos a enseñar aunque está muy cerca de la otra.
Formaciones de arena y óxidos, Cantera de arena, Laño, Burgos
Huellas de corzo, Cantera de Laño, Treviño, Burgos
Se puede acceder a ambas por una pista que sale de la carretera pero para ir a la cantera nosotros siempre hemos utilizado la pista de parcelaria, en regular estado, que lleva primero a la ermita románica de Nuestra Señora de Granado y poco más tarde a las antiguas instalaciones industriales de la cantera. Justo allí hay un poste de señales que indica a la derecha la pista que deberemos tomar.
Ermita de Nuestra Señora de Granado, Románico, Siglo XIII, Laño, Burgos
En nuestra opinión, el otoño es el mejor momento para visitar este lugar, el contraste de colores es increíble, no pasaremos calor ni los tábanos nos darán la tabarra y el terreno estará seco, algo realmente importante para evitar el barro que se forma en algunos puntos.
Cantera de Laño, Treviño, Burgos
Aunque haremos una breve descripción, nada mejor que verlo en imágenes, para lo que hicimos este vídeo en una de nuestras visitas:
Primero la pista atraviesa un humedal lleno de carrizos y otras plantas, además de ranas, libélulas y aves de diferentes especies. Cuando estamos ya delante de la cantera, si está bien seco, lo mejor es atravesar con cuidado la explanada blanca que tenemos delante y acercarnos a la cantera. El frente es algo inestable como se puede comprobar pro las rocas amarillas que han venido de lo alto así que mejor cierta distancia, así no habrá ningún peligro.
Humedal, Canteras de Laño, Treviño, Burgos
Estas rocas amarillas contiene uno de los tesoros de esta cantera, dientes de tiburón fósil. Los hemos visto en una ocasión guiados por un experto, nosotros a simple vista no hemos encontrado ninguno.
Diente de tiburón fósil, Cantera de arena de Laño, Treviño, Burgos
Fósil de diente de tiburón, Laño, Burgos, 7 mm
Ojo, que no estamos hablando del pariente burgalés de megalodón. Eso pensábamos nosotros la primera vez y anduvimos buscando colmillos que ni los de un Diente de sable, pero no, estos de Laño no llegan al centímetro.
Calcita, Cantera de arena, Laño, Treviño, Burgos, 8 cm
Aparte de los fósiles, podemos ver calcitas cristalizadas en algunas geodas, concreciones de limonita y hematites formando niveles endurecidos en la arena y sobre todo unas formaciones fruto de la erosión que nos dejarán con la boca abierta.
Arenas y limonita, Cantera de Laño, Treviño, Burgos
¿Y el cañón que se nos abre delante y se adentra en la arena? Increíble pero ojo con él que las paredes son altas y de arena compacta, vamos que de vez en cuando se derrumban, mejor solo asomarse a la entrada o verlo dese arriba. No es por asustar ni mucho menos, solo por precaución como en toda salida por la montaña.
Estratos coloreados de óxidos, Cantera de Laño, Treviño, Burgos
A partir de ahí caminar sobre un paisaje blanco que parece de otro planeta, hasta rodear la montaña y volver al coche por una ancha pista. No sé a vosotros pero a mí es un lugar que me tiene atrapado.
Cantera de arena, Laño, Treviño, Burgos
Canteras de Laño, Laño, Treviño, Burgos
Frente de cantera, Laño, Treviño, Burgos
Y para los muy piedreros no os preocupéis, a la vuelta al coche, aunque ya en otra entrada, os explicaremos dónde conseguir unas bonitas calcitas tipo cabeza de clavo. Hoy no era día de martillo, solo de disfrutar del paisaje, que no es poco.